*SEFIRAT HAOMER- CUENTA DEL OMER*

 

¿En qué consiste? ¿Qué es?

 

El Creador y Amo del universo por medio de Moshéh ordena hacer la cuenta de “Sefirat HaOmer”, presentar los sacrificios del Omer, por 49 días seguidos, para purificar al Pueblo de Israel y elevarse de los descensos por las iniquidades e impurezas que vivió mientras vivió en Egipto, tal como lo dice la Torah:

 

“Y contaréis desde el día que sigue al día de reposo, desde el día en que ofrecisteis la gavilla de la ofrenda mecida; (la cuenta será) siete semanas cumplidas serán. Hasta el día siguiente del séptimo día de reposo (Shabat) contaréis cincuenta días; entonces ofreceréis el nuevo grano al Creador”. A fin de que las almas de Tu Pueblo Israel sean purificadas de impureza. Por consiguiente, sea Tu voluntad, Creador y Elohim  nuestro  y  de  nuestros  padres,  que  en  mérito  de  la  sefirá  HaOMer  que  conté  hoy  “Jesed  Shebe  Jesed”  (benevolencia  por benevolencia), sea rectificado el daño que ha causado en la sefirát y que seamos purificados y santificados con la santidad suprema y que de esta manera se concedan las elevaciones de todo tu Pueblo y pueda conseguir que al rectificar nuestras almas, espíritus y cuerpos podamos lograr Tu benevolencia y nos puedas entregar Tu Ketuváh y Tu Torah y nosotros podamos vivirla y obedecerla para agradarte. Amén.

 

NOTA: El israelí debía presentar ante el sacerdote o en el templo, el segundo día de Pesaj una gavilla de los primeros frutos (trigo) que había cortado solemnemente en el campo como un sacrificio de rectificación y de purificación de las transgresiones que cometió y que lo hicieron descender espiritualmente y degradarse ante los ojos de su Creador. Mediante este sacrificio u ofrenda de súplica por la purificación y el perdón que produjeron estas transgresiones contra la voluntad del Creador y Sus instrucciones.

 

También rectifica esta ofrenda, el juicio que exista contra la tierra, las cosechas y los frutos.

 

“Ofreced a Mi el Omer en Pesaj, de modo que el producto de vuestros campos sea bendecido por Mí”.

 

Como ya no existe el templo, la cuenta aún persiste y fue sustituida por una oración ante el Creador cada noche de este precioso tiempo donde cada uno de Sus hijos, sacrifica una transgresión o impureza que desee que ÉL perdone y purifique con total arrepentimiento, rectificación (deseo de no recaer) y con el deseo de reparar el daño que causó haber caído y con la mayor voluntad de agradarlo.

 

¿Cómo se hace el cómputo de esa cuenta? El método del cómputo consiste en mencionar tanto los días como las semanas. Cada día se pronuncia el nombre de la transgresión o impureza que se quiere sacrificar. Por ejemplo:

 

“Hoy, el primer día de la primera semana de Sefirát HaOmer, sacrifico de todo corazón, con todo mi arrepentimiento, con el deseo de ser perdonado y/o purificado, porque no deseo repetirlo, ni volver a incurrir en ello y reparar el daño que causara por haberlo hecho. Por tanto, te suplico Padre de bondad y misericordia, me escuches y recibas hoy este sacrificio u ofrenda por la redención sobre: ·He desobedecido la Torah, la voluntad de nuestro Creador…”.

 

Al otro día: “Hoy es segundo día de la primera semana de Sefirat HaOMer o del sacrificio de la cuenta del Omer y sacrifico de todo corazón, con todo mi arrepentimiento, con el deseo de ser perdonado…”

 

Y así hasta el séptimo día de la primera semana, con lo cual, terminará la cuenta de esa semana. Al día siguiente de la segunda semana se dirá: “Hoy el primer día de la segunda semana de Sefirat HaOmer... y así termina el séptimo día de la segunda semana del Sefirat HaOMer… y así la tercera, cuarta, hasta llegar a la séptima semana (7x7=49 días de la cuenta) y luego viene el día 50, la celebración de la Fiesta de Shavuot, cuando el Creador habrá perdonado, purificado y elevado nuestros seres y nos entregará tanto la Ketuváh (contrato matrimonial, las diez palabras) como Sus instrucciones, la ley, Su voluntad expresa en  los cinco libros de la Torah (ÉL personalmente los escribió  en el corazón y los puso en la mente, el ADN del Pueblo escogido y bendito de Israel).

 

Vayikrá (Levítico) 23:15

Shemot (éxodo) 23:14

Shemot 12:1-20

Shemot 19:1-25; 20:1-17

IermiYahu31:31…

 

¿Qué otro significado tiene esta cuenta y tiempo?

 

Luego de recibir la redención (Pesaj y el sacrificio del cordero) y la liberación de los trabajos que de esclavos los tenía el faraón, el pueblo de Egipto y muy especialmente del sometimiento a un ambiente, costumbres y practicas idolátricas a los dioses de este pueblo pagano, necesitaban ser conscientes de lo mucho que habían descendido, degradado en su relación y obediencia a Su Elohim y a la Torah y poco antes de tocar fondo y de ser irreversible este deterioro, ÉL con Su amor y benevolencia los libró y los rescató. Ahora en esta sefirát, en este tiempo debían afligir sus seres y poco a poco, día a día, semana a semana recuperar la santidad que necesitaban (habían descendido 49 grados espirituales, si se puede decir de esta forma, en la escala de la degradación y el envilecimiento de su relación íntima con Su Amo y Señor, Su amoroso Creador) y era preciso recuperarlos, volver a ser Su Pueblo amado puro y sin mancha y eso tenía un trato fuerte y profundo.  Primero  fue  por  gracia  pura  y  ahora  también  tenían  Su  benevolencia  por  gracia,  pero  se  requería  un  proceso  de  doloroso arrepentimiento, rectificación y reparación para poder agradarlo.

 

Tiempo triste, de aflicción, de mucha necesidad de buscar Su compasión y amor. Tiempo que ha demostrado que el dolor, la disciplina, el trato han acompañado a nuestro Pueblo por esta época, tanto, como que en ella ocurrieron hechos lamentables como: las masacres de miles de judíos en las cruzadas; el holocausto de 6 millones de judíos en Europa por parte de los nazis; la rebelón de los guetos, las más crueles persecuciones a nuestro Pueblo, además de una gran plaga que diezmó a los seguidores del Rabino Akiva, etc.

 

La pregunta no es ¿Dónde estaba Elohim, el Elohim de Israel en esos momentos? Sino ¿Qué estaba haciendo el Pueblo de Israel, para que ÉL permitiera semejante trato?

 

ÉL siempre espera con infinito amor que los Suyos sean fieles a Sus instrucciones y estén atentos a Sus deseos, que caminen con la rectitud que ser sus hijos demanda, pero como Padre amoroso, corrige, disciplina, trata con Sus hijos desobedientes.

 

Durante este tiempo, el Pueblo se abstiene del regocijo. Por ejemplo, no celebra bodas.

 

La Sefirat comienza con Pesaj y termina con Shavuot. Va de la redención a la entrega de la Ketuváh y la Torah. Es una fuerte advertencia de que la libertad debe estar sujeta a la fidelidad y a la observancia de la Torah.

A la salida de Egipto, luego de 430 años de permanencia, de los cuales unos muy significativos bajo la opresión, la esclavitud, la idolatría y las costumbres paganas, dañaron e hicieron descender espiritual y moralmente la actitud y el comportamiento del Pueblo escogido de Israel, el Creador puso en marcha un efectivo y definitivo plan de rescate y restauración con unos pasos muy claros:

 

1.Redención, perdón de las transgresiones, purificación de la contaminación ritual y sobre todo y muy importante, sacó el yetzer hará (inclinación al mal, consecuencia de la caída, naturaleza pecaminosa) y nos puso una porción suficiente de Su naturaleza divina. Esto, mediante el sacrificio del cordero de Pesaj y su sangre como señal de redención y protección.

2.Sacó la contaminación que produjo el consumo de alimentos sacrificados a la iniquidad, a dioses paganos falsos mediante el consumo del sacrificio del cordero de Pesaj y los panes sin levadura.

3.Elevó paso a paso en 49 días, de los descensos espirituales en los cuales había incurrido el Pueblo debido al contacto y la convivencia permanente con un pueblo pagano y envilecido por la idolatría. Esto mediante el sacrificio de una gavilla de trigo diaria que era ofrecida por cada una de las transgresiones para el perdón y redención.

4.La purificación de la contaminación ritual por el permanente contacto con todas las impurezas cotidianas de Egipto. Esta purificación  mediante  el  paso  por  el  fondo  de  esa  gran  mikveh  que  fue  el  mar  de  Cañas,  donde  fue  sepultado  todo  lo  que representaba el estado, el poder, la soberbia, el control de la otra simiente sobre Su Pueblo, aunque fuera temporalmente.

5.La ignorancia y la falta de convicción de un pueblo que careció de la vivencia de la Torah, de la voluntad, de las instrucciones, mandamientos y de las citas o convocaciones santas de Su Creador, redentor y esposo por el sometimiento al que se vio avocado durante tan largo tiempo sin que reaccionara para solucionarlo.

6.Esto mediante el trato y enseñanza durante el peregrinar por 40 años en el desierto,  bajo el liderazgo  de un gran y valioso instrumento en las manos del Creador como fue Moshéh, hasta la entrada a cumplir con Su plan perfecto y compartir con ÉL, Su amor y Su reino en la tierra prometida de la mano de Josué.

 

Veamos algunos de los temas de los que debemos arrepentirnos, rectificar y reparar todos los miembros del Pueblo de Israel. Estos temas los sugiero según la posible violación de los mandamientos del Creador, los 613, como figuran en la Torah. Pero si la persona encuentra en su vida privada, otras prioridades, otras transgresiones que estén marcando o dañando la comunión con el Creador y/o le roban la paz, debe incluirlos en el orden de su elevación y rectificación.

 

*CUENTA DEL OMER*

(sacrificio de las espigas)

 

*PRIMERA SEMANA*

 

Día 1 PURIFICACIÓN Mandamiento 318

Es necesario purificarse de todo lo que contamina el cuerpo y los sentidos.

Todo aquel que haya tocado un animal muerto o una de las 8 especies de reptiles, se convierte en ritualmente impuro, y si los alimentos entran en contacto con ellos, también se vuelven impuros. Las mujeres en la menstruación y las que están en período de posparto inmediato que estando en impureza tocan o comparten sus lechos o asientos con familiares que están en labores de estudio o compartir la Torah, los contaminan. Estar con “lepra”, o compartir con leprosos contaminados están. Un hombre cuando manare involuntariamente o fuera de la vagina de su esposa, está impuro. Una mujer que sufre de flujo de sangre es impura. Todas las violaciones a lo ordenado por el Creador voluntaria o involuntariamente son contaminación o impureza ritual.

 

Día 2 DESOBEDIENCIA DE LA TORAH, instrucciones, mandamientos, estatutos, decretos o no acudir a las citas apartadas del Creador. 613 mandamientos. Una persona del Pueblo esencialmente debe estar sujeta con docilidad en obediencia al Creador y a Su voluntad, sin razonar, debe estar sujeta al espíritu, no a la carne. Aquel que espera comprender algo de la Torah, para obedecerlo, o que está buscando razones necesarias para hacerlo, no está sujeto al espíritu y no ama al Creador.

 

Día 3 NO HACER EL SACRIFICIO DEL OMER 263, Quien no está consciente de que debe recuperar la integridad espiritual que perdió por haber practicado y/o vivido entre las doctrinas paganas, el error, la idolatría, la adivinación, la iniquidad y todo aquello que contraviene la Torah, entre las naciones gentiles y no está dispuesto al arrepentimiento, a la rectificación y a la reparación, con uno de los instrumentos que escogió el Creador usando este sacrificio para salir y elevarse de nuevo, está faltando a la voluntad del Creador y es abominación para ÉL.

 

Día 4 SACRIFICIO DE LA GLOTONERÍA. CONSUMO DE ALIMENTOS INAPROPIADOS, 271, Una de las transgresiones más relevantes que cometió el Pueblo en Egipto y que reclamó luego en el desierto, fue el consumo de excesos o saciedad extrema de comidas y bebidas. Porque relajan la disciplina y el respeto por el cuerpo, la salud y el espíritu, ya que se corre el riesgo de comer lo prohibido y porque al saciarse en exceso se olvida de quien suple y se ostenta con soberbia.

 

Día 5 CAER EN LA INMODESTIA E IMPUDICIA, 245, El contacto permanente con las costumbres de los gentiles que no respetan la presencia del Creador en todas partes y todo el tiempo y/o no les molesta y se vuelve natural no estar vestidos y presentados con el respeto debido con pudor y modestia. Nuestros cuerpos no están hechos para la exhibición. Recordemos que son templos vivos del Ruaj HaKodesh y el Creador los hizo Su morada y abusar con las formas de profanarlo, son un agravio para ÉL.

 

Día 6 SEXO  DESORDENADO  o  la lujuria,  que además  están expresamente proscritos  de lo que  agrada al  Creador,  porque  degradan y cosifican a quien los practica. Lo mantienen atado, dependiendo de ello, son una de las formas de idolatría que más abomina y repugnan,

 

puesto que se practica como forma de dar placer a sus sentidos y bajos instintos. Coloca a ese placer y la esclavitud que produce, por encima del Creador, convirtiendo ese objeto, persona o actitud como ídolo que aparentemente llena la vida, pero que poco a poco la degrada y destruye. La fornicación, el adulterio, la masturbación, el bestialismo, la homosexualidad, el uso contra la naturaleza, la lujuria en todas las expresiones,  las  aberraciones  de  todo  tipo  y  género  que  practican  los  paganos,  dañan  y  entenebrecen  la  espiritualidad  y  rompen  la comunión con ÉL, envileciendo la vida. Hay que sacrificar y renunciar a todo ello.

 

Día 7 AVARICIA, Codicia y/o ostentación son unas de las muchas formas de desconfiar de la provisión divina, de la humildad y sencillez que Él nos pide para que nuestros corazones no se infatúen. Somos Su esposa y ÉL el Rey de toda la creación, compartirá con nosotros sin egoísmos. ÉL es el dueño del oro y de la plata, entonces ¿Para qué codiciar las limitadas riquezas de esta tierra, por grandes que sean son migajas comparadas con las riquezas del universo que heredaremos cuando se celebre la Boda con el Rey y Amo del universo? Sacrifiquemos nuestro apego y ostentación desmedida de las riquezas de este mundo.

 

*SEGUNDA SEMANA*

 

DÍA 1 LASHÓN HARÁ, Mala lengua, hacer mal uso de lo que se habla, de lo que se dice del prójimo, de la impiedad, del juicio, la crítica, el señalamiento de los errores de los demás, de sus reputaciones, los demeritamos, solo viendo los defectos. La crítica, la murmuración contra las autoridades en los centros educativos y de formación, contra los líderes cívicos que el Creador puso sobre nuestras comunidades, ciudades, provincias, la nación y todo tipo y género, es abominación para ÉL. Nos daña, nos hace soberbios, rebeldes, indisciplinados, nos niega la bella oportunidad de ver la soberanía del Creador en cada persona u organización puesta por ÉL. Es contra ÉL la rebelión. Sacrifiquemos lo malo que sale por nuestra boca, para que nuestro corazón, fuente de lo que sale por ella, sea sano y limpio y que ÉL pueda bendecir nuestras vidas. Recordemos lo que le dijo a nuestro padre Abraham: “Al que te bendiga, Yo bendeciré y al que te maldiga, Yo maldeciré”.

 

Día 2 MALA RELACIÓN CON LA AUTORIDAD cualquiera que sea, especialmente con el Creador. La persona pierde en autocontrol, se vuelve insegura, agresiva, un poco orgullosa, irritable, explosiva y la ira incontrolada aparece como una característica que aflora denunciando la incapacidad de domino propio. Es una debilidad que produce rechazo, violencia, que perturba las relaciones y el amor entre los hermanos, lo cual desagrada y contradice la voluntad divina. Hay que sacrificar esta situación, ganar dominio propio y seguridad en las convicciones e identidad de hijos humildes y dóciles del Creador, sin ser serviles, solo honestamente, recto y firme, con carácter, pero firme.

 

Día 3 BRIT MILÁ, es el pacto del Creador con Sus hijos. Una marca indeleble solo en los que ÉL llama para ser una realidad y que marca para la eternidad a quien ÉL escoge y llama. Primero se hace en el corazón cuando el hombre y la mujer viven y cumplen los mandamientos y la Torah y luego para marcar la carne y sacar la levadura del varón. Ningún incircunciso entrará al reino de los cielos. Tener la Brit Milá y usarla indebidamente, no respetándola, la puede invalidar, porque es una afrenta, un desprecio a la voluntad de aquel que la otorga como una marca a los Suyos. Hay que sacrificar todo lo que agravie y profane el pacto. Hay que rescatar su valor irremplazable del amor divino con cada uno.

 

Día 4 SACRIFICICOS AL CREADOR, primero al ofrendar la propia vida, sacrificarla para conseguir Su perdón y la remisión de nuestras transgresiones y sacrificar para agradecerle por todo lo que tenemos y sacrificar cada día para lo que hagamos, pensemos, deseemos y digamos sea solo para Su gloria y honra. Hay que sacrificar para que nuestro ser obedezca al Creador dócilmente y sin restricciones todo cuanto nos ordenó, hasta el último de Sus deseos, que para Sus hijos son órdenes. Hoy en vez de sacrificio de animales, la oración con todas las fuerzas del ser, la que es seguida del compromiso y testimonio. La actitud dócil de nuestro corazón es un gran sacrificio, si es acompañada con la dependencia de ÉL con humildad y agradecimiento. La obediencia es la clave.

 

Día 5 FIDELIDAD AL CREADOR, la emuná es esencial para agradar al Creador y cumplir con Su plan perfecto y propósitos (la Boda y el Reino) y conseguir que Su amor impacte y moldee nuestro amor y bienestar. Sin emuná, sin fidelidad, es imposible. “Los que me aman, son los que obedecen mis 613 mandamientos”. La fidelidad fue reemplazada inicuamente por la palabra griega “fe”, haciendo desaparecer la fidelidad al Creador, Amo del universo y Elohim de justicia, abriendo la puerta a la idolatría, dándole la espalda a Su majestad יהוה, sometiéndose a los propios valores espirituales y materiales que se han inventado, que cambiaron los mandamientos por 10 y por su dependencia de ellos. Ejemplo, la razón, el conocimiento humano, el dinero, la teología, la interpretación, la meditación, el ministerio de la iglesia, las imágenes, los sacramentos, etc. Hay que sacrificar esta infidelidad y falta de coherencia en su identidad y vivencia con Su Elohim y Su voluntad divina.

 

Día 6 DÍA DEL CREADOR, el reposo, la cita separada que ÉL quiso establecer para reunirse con los Suyos, con los que le hacen caso, obedecen y hacen Su voluntad. El Shabat es la reina y la base de los tiempos. Si ÉL citó a Su Pueblo el séptimo día, es elemental que se acate y se acuda a esta “Santa Convocación”, NO ES EL PRIMER DÍA, (el domingo), esta una cita que estableció el hombre, la iglesia, su “extraordinario magisterio” que le pareció que tenía la suficiente autoridad para “citar” al Creador cuando ellos dicen. El Shabat, el séptimo día, se debe observar y no es negociable, ni justificable y la pena por su violación es la muerte espiritual y física, exponerse a recibirla y peor aún, despreciar la voluntad divina y errar adrede en la convocatoria a reunirse con el Creador, es perder la oportunidad única de recibir Su amor, Sus secretos, instrucciones, leyes para obedecerlo y agradarlo como merece. No les es dado a ningún hombre, entidad u organización religiosa o no, “cambiar” o “desconocer” las Santas Convocaciones (Fiestas) que nos hace por siempre el Amo absoluto y Adon de la creación. Jamás se ha delegado esa atribución soberana que le pertenece solo a ÉL. Quien viole esta convocación que estableció el día siguiente a terminar la creación, es además de desconocerlo como soberano y Creador de todo lo que existe, una falta absoluta de sumisión y obediencia, respeto y fidelidad a ÉL. Hay que sacrificar este desafío a la autoridad y desprecio a reunirse con ÉL, es una manifestación de soberbia y rebeldía que lo llama a aplicar con todo rigor Su justicia e ira.

 

Día 7 AMARÁS A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO, lo cual resume la esencia de Su plan perfecto y propósitos (la Boda y el Reino), Su ley y lo más importante, contrariar lo que ÉL llama “Su más importante mandamiento luego de amarlo a ÉL”. Odiar, guardar rencor, juzgar, murmurar, vengarse de las ofensas, etc., es una abierta contradicción y negación de la voluntad divina sobre la manifestación de tu amor y la de ÉL. Todos tenemos defectos y cometemos errores, solo los jueces que ÉL designa pueden juzgar. Lo que nos toca hacer y que no hacen los paganos, es examinarnos continuamente, no con el objetivo de destruirnos, sino para corregirnos, elevarnos, edificarnos y así decirle que no se equivocó con nosotros, que somos Su mejor obra, agradecerle por lo que nos dio y somos. Todo lo que juzguemos sin Su permiso será negativo, destructivo, hará daño a la obra de Sus manos, sería como decirle que ha hecho Su obra imperfecta. Si se trata del prójimo hay que considerar que es parte de Su esposa (Israel), parte de nosotros, la que escogió, apartó, pagó precio, marcó y puso en su ADN, una porción suficiente de Su naturaleza divina dio Su Ketuváh. No nos equivoquemos, no lo disgustemos, seamos obedientes a Sus instrucciones para agradarlo. Sacrifiquemos el odio, el egoísmo, el juicio, la intolerancia, todo lo que afecta al prójimo para sanidad propia y por amor a ÉL. 

 

*TERCERA SEMANA*

 

Día 1 MATRIMONIO, ÉL constituyó la unión entre un hombre y una mujer, bajo un mecanismo institucional que es además en el caso de la Torah, el ensayo de lo que hemos llamado “el plan perfecto y Sus propósitos” (Su Boda como Soberano del universo, con el Pueblo escogido, a quien apartó, pagó precio, marcó, que recibió la Torah y recibió una porción suficiente de Su naturaleza divina). Entre las condiciones necesarias del sostenimiento de esta hermosa institución, fruto del amor y la ternura está el cumplimiento de las obligaciones íntimas, los encuentros sexuales. Si estos no se cumplen, se manejan o condicionan de alguna manera, se ejercen con violencia, monótonamente, se degradan con malas practicas de uso indebido o contra la naturaleza, introduciendo vicios, costumbres paganas que son elementos de destrucción y ruina en todos los sentidos dentro de la pareja, producen el rompimiento de esa unión e institución, lo que daña la relación y la edificación de los hijos, que son quienes pagan las consecuencias. Esto disgusta tremendamente al Creador, ya que es un rechazo claro y nítido a Su plan perfecto, a Su voluntad. Hay que sacrificar estas malas practicas que han minado la base, el fundamento de la familia y de la estructura social, atentando contra el objetivo principal y objetivo definitivo.

 

Día 2 CONTAMINACIÓN RITUAL, mantenerse libre de todas las impurezas de nuestros cuerpos y sentidos, que nos impiden mantenernos ante la presencia del Creador, de frecuentar físicamente el templo y peor aún relajar el respeto y la consideración que debemos a la majestad  unida  y  suprema  del  Amo  y  Creador  del  universo,  Elohim  de  justicia,  nuestro  Redentor  y  amoroso  esposo.  Una  cosa  es  el arrepentimiento, la rectificación y la reparación de nuestras transgresiones y pecados que se hacen contra ÉL que es único, que puede perdonar y olvidarlos, pero la pureza “ritual” es a la que me estoy refiriendo y que para ÉL es imprescindible, esencial, tanto que la practicó cuando hizo teviláh en el río Jordán en compañía de Su primo hermano Juan el precursor (mal llamado el bautista). Es tan importante que antes de entregar las tablas y la Torah, ordenó a Moshéh decirle al Pueblo que se purificara, que no tocara mujer por tres días. Hay múltiples ejemplos de teviláh a lo largo de la narración de la Torah y los hechos del Pueblo en su peregrinar por el desierto y siempre. La iglesia, los gentiles borraron la purificación o teviláh y la sustituyeron por el “bautismo”, que no figura, que nadie practicó, que ÉL no ordenó y nadie en Israel jamás practicó, ni el Mashiaj. Los paganos no se purifican, solo el Pueblo de Israel. Debemos sacrificar el hecho de no obedecer, ni practicar la purificación ritual y de irrespetar y lastimar la dignidad y la majestad del Creador y esposo amoroso.

 

Día 3 OBEDIENCIA, A quien no es capaz de obedecer, le queda muy difícil dar órdenes o tener autoridad. Recordemos que un hombre, una persona justa es aquella que obedece los mandamientos. Una parte muy importante y definitiva para llegar a ser reconocido por el Creador como justo, es saber y ejercer la obediencia y reconocer la autoridad que viene del Creador siempre y para siempre. Pareciera que algunas autoridades que tenemos no fueron puestas por ÉL o que permitiera que así fuera, pero tal y como lo dice en la Torah, la autoridad y la justicia  vienen  de  ÉL.  Es  necesario  sacrificar  el  hecho  de  no  aceptar  las  autoridades,  no  obedecerlas,  no  sujetarse  a  ellas,  conspirar, murmurar o sabotearlas porque no nos parecen adecuadas o simplemente porque no nos gustan o no convienen a nuestros intereses y sanar nuestras almas y criterios y dar paso al orden, disciplina, obedeciéndolas dócilmente para nuestra formación y beneficio espiritual.

 

Día 4 MENTIRA, hasatán es el padre de la mentira, a quien le parece normal mentir, es dependiente o esclavo de ella. El Creador nos ha dicho que la verdad nos hará libres. Todos sabemos que el Mashiaj (ÉL mismo) es la fuente de la verdad. ÉL es la verdad. Practicarla y vivirla es un bien espiritual necesario, es también declarar que dependemos de ÉL y que no tenemos nada que ver con hasatan, el más grande instrumento del error y las tinieblas. Una persona veraz, es una persona íntegra, de limpio corazón, cuyo testimonio ilumina el camino y las vidas de todos los que lo rodean. Eso agrada sobremanera al Creador. Sacrificar esta práctica, aunque sea esporádica o se crea es leve, es dar un paso muy firme para lograr la santidad necesaria para tener una buena relación con el Creador y esposo y dejar que Su naturaleza de verdad fluya en nuestro ser.

 

Día 5 FALSO TESTIMONIO, Si una persona tiene reputación de ser veraz, de jamás dar un falso testimonio, de ser recto y limpio de corazón será reconocido por su testimonio de vida. Si la palabra y los compromisos son honrados siempre y tienen valor de ley de vida e integridad, esa persona no será requerida o deberá jurar para que le crean, pero si por alguna circunstancia especial, fuera necesario hacerlo, su fundamento deberá ser la verdad y solo la verdad y solo lo podrá hacer por nada o por nadie que esté en los cielos o la tierra, en las aguas o debajo de ellas. Solo el Nombre de יהוה Bendito Sea es garantía en el universo sobre la veracidad de un asunto. ÉL solo conoce y respalda. Si no conocemos el Nombre o no lo podemos pronunciar porque según la tradición nadie lo conoce o sabe cómo se pronuncia, entonces

¿Sobre cuál nombre se puede jurar? Es necesario sacrificar el uso de falsos nombres, de sustitutos, dejar de invocarlo cuando ÉL lo desea o es  necesario  con  el  debido  respeto,  solo  cuando  tenemos  esa  sanidad  y  conseguimos  la  debida  santidad  y  respeto,  ese  Nombre  es necesario que se conozca y teman todas las naciones. Es el de nuestro Creador y Padre, de nuestro Redentor y esposo. ¿Cómo nos lo ocultaría?

 

Día 6 PRONUNCIAR SU NOMBRE, si ya ÉL nos reveló Su nombre y el de ÉL encarnado como Mashiaj y el de Su Espíritu de Santidad, es un agravio muy grande no pronunciarlo en los momentos muy importantes y adecuados como es debido, así como ocultarlo y sustituirlo con fórmulas que camuflan aparentemente. Tan delicado es usar un nombre falso para referirse al Creador, a Mashiaj o al Espíritu de Santidad, como pronunciar los verdaderos sin el debido respeto y necesidad. Todo fue hecho por Su nombre y todo fue perdonado por Su nombre. Su nombre es pronunciado sobre los Suyos y se ha grabado en nuestras frentes. No se debe jurar sino por Su nombre y es puesto sobre todo nombre, Su nombre nos indica que ÉL fue, es y será, lo cual lo singulariza sobre cualquier otra persona espiritual que haya en el universo. ÉL fue quien nos dio la vida y puso Su voluntad en nuestro ADN y Su naturaleza divina. Es y será nuestro esposo. Entonces, si todo nos lo dio, todo nos lo revela, compartió Su amor y la obra de Sus manos con nosotros ¿Cómo nos ocultaría, nos prohibiría pronunciar Su santo nombre? Debemos sacrificar que, por normas de hombres, desconozcamos que puso en nuestro ADN y nos reveló Su nombre y lo hemos ocultado, escondido o malinterpretado, provocando que los gentiles le pongan “apodos” y lo llamen como les provoque, lo cual es un irrespeto. Todo porque los verdaderos conocedores y depositarios lo ocultaron contra Su voluntad.

 

Día 7 ASIMILACIÓN, entre los gentiles paganos produce entre los que la sufren una falsa sensación de estar en la verdad, por la forma en que practican sus devociones y ritos. Algunas veces tienen formas de “purificaciones” que reemplazan la teviláh de la Torah, la que concretamente ordenó el Creador, por baños rituales, sahumerios, rezos, sangre de humanos o animales y lo que es más común, los riegos y bebedizos  de  hechiceros,  adivinos  y  falsos  sacerdotes  del  más  allá.  Dejar  que  seamos  profanados  o  tocados  por  fuerzas,  energías, elementos que contradicen expresamente la voluntad divina, es también una profanación y abrir puertas para que la oscuridad y la confusión entre en nosotros, en nuestras mentes, apague nuestros espíritus. Es necesario sacrificar esas malas practicas e influencias negativas por seductoras que parezcan. Debemos limpiarnos de todo lo profano que toque nuestras vidas y/o familias. Algunas de las representadas por símbolos que parecen inofensivos, pero que comprometen nuestra limpieza y pureza ritual. 

 

*CUARTA SEMANA*

 

Día 1 HONRA A LOS PADRES o progenitores, no solo es un mandamiento con promesa, sino que es un ensayo de lo que debemos hacer con nuestro Padre el Creador, Su majestad יהוה y a nuestra madre la Torah. Es un acto sublime de gratitud por lo que nos dieron e hicieron por nosotros. Fueron instrumentos para darnos la vida, nos criaron y formaron según los principios y valores que el Creador puso en su naturaleza y les infundió. Nos sustentaron y por encargo del Creador nos llenaron de su amor y ternura. Las generaciones, los ascendientes en nuestro Pueblo son una minuciosa relación de todos los padres que ÉL escogió para que portáramos el linaje, la simiente y la herencia genética de un Pueblo que reinará el universo por la eternidad. Nuestros padres fueron los instrumentos necesarios para conservar al Pueblo, para hacerlo crecer y para que todas las naciones vean en él la escogencia y unción. Sacrifiquemos los desprecios, la falta de gratitud,  las  necedades,  las  críticas  y  la  falta  de  respeto  por  quienes  todo  lo  dieron  para  que  nosotros  creciéramos  con  todas  las oportunidades y más que ellos. Debemos sacrificar el desamor, la rebeldía, el juicio y tantas cosas desagradables que hicieron sufrir a los padres o que les hacen sentir que sus hijos los abandonaron, o que pareciera que no valieron los sacrificios y los esfuerzos para criar y sacar adelante a sus hijos, es decir, estar desencantados y desalentados.

 

Día 2 AGRADECIMIENTO, no habla sino de reconocimiento íntimo de todos los cuidados, la dedicación, los esfuerzos, sacrificios y sobre todo el amor que nos entregó con absoluto desinterés, mezquindad o egoísmo alguno. A ÉL le plació escogernos y apartarnos de las demás naciones, darnos un contrato matrimonial, quiso compartir Su amor y la obra de Sus manos, dio la vida de Su hijo, el Mashiaj (ÉL mismo), nos grabó Su voluntad divina en nuestro ADN (la escribió en nuestros corazones y la puso en nuestras mentes), sacó la inclinación al mal, producto de la caída y la reemplazó por una porción suficiente de Su naturaleza divina. Todo esto por Su infinito amor, generosidad y entrega. No agradecer cada día, no honrarlo con nuestro corazón y fuerzas es el más GRAVE DELITO DE INGRATITUD Y DESLEALTAD DE LA CREACIÓN. Debemos sacrificar lo poco o casi nada de gratitud hacia ÉL cuando no se lo decimos obedeciendo lo que nos ordena con nuestro amor. Si queremos honrarlo debemos obedecerlo con docilidad y gratitud.

 

Día 3 USO DE LA RAZÓN Y EL JUICIO para obedecerle a ÉL y no la emuná, la obediencia amorosa, sumisa, con el convencimiento de que ÉL sabe de donde viene todo, para qué fue hecho y cómo funciona para cumplir Su voluntad. Esto no quiere decir que debamos desechar la razón y juicio humano, porque si ÉL nos los dio, significa que son parte de los dones con los cuales nos dotó y ÉL no se equivoca. Si obedecemos confiando en ÉL, depositando nuestras acciones, ÉL le explica a nuestra razón y éxito el juicio. Decir que no obedecemos sino entendemos es andar en la carne, confesar que no somos del espíritu. Recordemos que ÉL dijo: “Los que salieron del espíritu, solo ellos comprenden las cosas del espíritu, pero los que salieron de la carne, no entienden las cosas del espíritu, les parecen locura”. Si ÉL lo dice,

¿Por qué los hombres no le hacen caso? Preferimos ser “locos” que seres “espirituales” para recibir directamente de ÉL todo lo que necesitamos, que tener que luchar para conseguirlo, porque no entendemos que ÉL se ha obligado a suplirnos todo si somos espirituales. Sacrificar el uso de la razón y el juicio para obedecer Su voluntad, para que nuestras vidas sean objeto de Su comunión espiritual con ÉL como Padre y proveedor absoluto a quien es de Su espíritu, porque salió de ÉL, no de nuestras fuerzas.

 

Día 4 CUIDADO DE NUESTROS CUERPOS, lo que ellos representan en el plan perfecto y propósitos para con nosotros. La pureza ritual, el matrimonio y sus funciones son los ensayos primordiales de Su objetivo final, ser Uno con ÉL y compartir Su amor y la obra de Sus manos. Aquí aparecen las reglas claras de respeto y acatamiento de esa voluntad de santidad que mantenga nuestro ser en ese propósito. Por ello, el adulterio, la fornicación y la masturbación son contrarios al cumplimiento de esas propuestas y propósitos divinos. Las actitudes sexuales son un gran regalo para cada uno de Sus hijos, pero ese regalo tiene unas normas estrictas de funcionamiento de tiempo y lugar y más con lo que ÉL instituyó como pareja formal y de la manera que ÉL lo permite. La fornicación se ejerce cuando estamos solteros, sin un vínculo formal con la pareja. La practica de ese acto está prohibida, porque degrada el cuerpo, la integridad y la dignidad de las personas, colocando el placer por encima de la voluntad y el respeto a ÉL. El adulterio consiste en que un hombre tenga una relación sexual con una mujer casada, porque se rompe el vínculo matrimonial y profana la santidad de este don dado a las parejas. La masturbación produce efectos espirituales para quien la practica. Además de no ser natural, desperdicia los elementos que producen la vida, causa dependencia y dicen nuestros hermanos ortodoxos que el esperma desperdiciado, es usado por los demonios para crear más demonios. El sexo es un don maravilloso que anima y estimula la intimidad, la unidad, la ejad en la relación, es vinculante, por ello, no se puede degradar. Cuando se comete fornicación y/o adulterio, se convierte en idolatría que es abominación para ÉL, ya que la persona prefiere el cuerpo, el placer, la lujuria con otro, en vez de la obediencia y la sumisión a ÉL, poniéndolo en 2º lugar sobre todas las cosas. Es necesario sacrificar el sexo inapropiado, y fuera de lugar, nuestra pureza y obedecer la voluntad divina.

Día 5 EL OBRERO ES DIGNO DE SU SALARIO, dice el Creador, refiriéndose a que nadie puede negarle la justa remuneración a quien bien le sirve y hace el trabajo necesario para dar bienestar. “Nadie puede retener de un día a otro, el salario a sus servidores, porque es abominación para el Creador, es un delito ante Sus ojos”. Completa el trato con justicia a quien compromete su trabajo, sus conocimientos, habilidades, fuerzas, tiempo, lealtad a nuestro servicio. Ser honestos y tratar con justicia a los demás y no aprovecharse como lo hizo y sigue haciendo Egipto (el mundo, los gentiles) con algunos, con quienes se ejerció un trabajo de esclavitud descarada y abusiva que sometió y degradó a nuestro Pueblo por muchos años, provocó la ira del Creador que hizo que le integraran al Pueblo lo que le pertenecía en justicia y que le había despojado y la remuneración justa con intereses dolorosos que le habían retenido injustamente por su trabajo duro y cumplido. Egipto fue arruinado, su ejercito destruido y borrado y su gobernante y asesores dados de baja. La ira del Creador por este delito es sumamente drástica y radical y de ello se debe tomar ejemplo para no repetirlo. Sacrifiquemos incumplir con los salarios y la compensación que debemos dar a nuestros empleados y servidores, para que además de ser justos le agrademos a ÉL.

 

Día 6 LA TRAICIÓN, la conspiración, el hablar mal de nuestras autoridades y de los que les debemos lealtad, fidelidad y obediencia, es un crimen abominable que llama a la ira al Creador y que no les tolera a Sus hijos, porque es como si lo cometieran contra ÉL mismo. La traición y todo lo que conspira contra la lealtad se lleva a cabo en las tinieblas, en la oscuridad, a espaldas de las personas contra las cuales se conspira, lo cual califica y ubica el origen de esta especie que es contraria a la voluntad divina y causa un gran daño en las relaciones entre el hombre y el Creador. Debemos obrar con lealtad y rectitud y sobre todo conscientes de que toda la autoridad viene y fue puesta por el Creador por Su voluntad y con Sus propósitos sobre nuestras vidas. Debemos sacrificar este terrible mal que corroe la integridad, la dependencia y sumisión a Su soberanía total. Para liberar nuestras vidas de la terrible ira del Creador y poder agradarlo con solvencia y amor.

 

Día 7 HEREDEROS DE TODO, el Creador es el dueño de todo, nuestro esposo, por lo tanto, como esposa, también será nuestro, dice que no toquemos lo que no es nuestro, ni los bienes, ni la honra, ni la reputación, ni la vida, ni el tiempo, ni la vida espiritual, ni la familia. Como consecuencia de esta prohibición perentoria, tampoco se puede quitar la libertad, o secuestrar a nadie, porque es un delito execrable que llama a Su ira. Lo nuestro es lo nuestro, y lo demás, de los demás. El Creador quiere que así sean las cosas por la justicia, el respeto y el amor al prójimo y la obediencia a Sus instrucciones. Debemos sacrificar esa indelicadeza e inclinación para que nuestro corazón esté en paz y podamos honrar Su amor en nosotros y en nuestro prójimo.

 

*QUINTA SEMANA*

 

Día 1 NO HABLAR MAL, maldecir, lashón hará, es un defecto, una transgresión frecuente en el Pueblo de Israel durante su travesía por el desierto, que desembocó en la murmuración contra las autoridades y el Creador. Hablar mal del prójimo es una abierta contradicción contra la voluntad divina juzgada por ÉL con toda la severidad, incluso con la pérdida de la vida. Cómo será hablar contra Su Pueblo si ÉL lo considera Su especial tesoro, a quien escogió sobre los demás. No consiente que nadie, ni nada lo toque con actos, o con palabras, ni siquiera con un pensamiento. Mal decir o hablar mal de Su Pueblo, es una ofensa personal para ÉL, como si le estuviéramos diciendo que se equivocó, que no acertó en Su escogencia, lo cual es imposible. Por lo tanto, honrando la disposición del Creador y por el amor que debemos a ÉL y a nuestro Pueblo, sacrificaremos esta gravísima falta y con todo el arrepentimiento y el dolor rectifiquemos nuestra conducta para conseguir Su perdón y jamás volver a cometerlo para agradarlo.

 

Día 2 REVELACIÓN, cuando no tenemos revelación y/o hemos cerrado los canales de comunicación directa con el Creador a través del Ruaj HaKodesh, acudimos a la interpretación, a las explicaciones de los hombres sobre lo que está escrito en las instrucciones, leyes, mandamientos y la voluntad divina expresada en la Torah y el Tanak y eso deja en manos de los hombres lo que solo le pertenece a ÉL. Cuando nos atrevemos a adulterar, mutilar, agregar, corregir o cambiar cualquier cosa por pequeña que sea en uno de los libros de las Escrituras, estamos adulterando y/o falsificando Su voluntad y despreciando Su verdad. Debemos sacrificar este desprecio y desperdicio que hacemos de Su personal asistencia y de Su única verdad escrita en nuestro ADN (corazón y alma) y que podemos aprovechar todo el tiempo si confiamos y jamás atrevernos a adulterar Su verdad única y soberana.

 

Día 3 OFRENDA, ÉL ordena que jamás nos presentemos ante Su presencia con las manos vacías, sin una ofrenda, no porque necesite nada físico de nosotros, sino porque necesita la actitud que tenemos en nuestros corazones. Las ofrendas no tienen en este caso una tasación en cuanto a cantidad. Son de libre elección, la persona puede traer la ofrenda que desee y que crea que es respetuosa y digna de Su Señor y esposo. Recordemos que ÉL tasa en medio shekel (casi una cuarta parte de y media de dólar, unos 400 o 500 pesos), el valor de la redención tanto para ricos, como pobres, prohibiendo exceder este valor en todos los casos. Traer poco dinero, no es una ofensa para ÉL, pero debemos traerlo cuando venimos a Su presencia, a los servicios, las enseñanzas, la consejería, Fiestas, celebraciones y a cualquier actividad como orar y hacer peticiones y/o agradecer Sus favores. Ceremonias como el Bar/Bat Mitzváh, presentaciones de niños, Brit Milá, matrimonios,  Shabat  congregacionales,  celebración  de  Fiestas,  enseñanzas  privadas  o  familiares,  ocasiones  cuando  se  busca  que  el Creador revele el nombre a mujeres y personas que no lo tengan, consagraciones o nombramientos en los ministerios, etc. Será necesario traer una ofrenda como lo ordena el Creador. Estamos corriendo con un faltante, un incumplimiento que hemos cometido desde el principio hasta hoy. No hay tarifas, no existen cantidades precisas, solo la obligación por un mandamiento de traer en secreto y depositar en el alfolí, la ofrenda voluntaria para cumplir con el mandamiento. Debemos sacrificar el hecho de habernos presentado todo el tiempo y en todas las circunstancias sin traer y cumplir con las ofrendas.

Día 4 “AMAR AL PRÓJIMO COMO A NOSOTROS MISMOS”, es la parte de uno de los mandamientos más importantes, según una respuesta que dio el Mashiaj cuando fue interrogado y en ese sentido. Es muy hermoso, la base y el fundamento de nuestra identidad y unidad de las relaciones con nuestro Pueblo y pertenencia y además nos llena de gozo. Amar al prójimo (hermanos, miembros del Pueblo y la comunidad de los escogidos) representa una serie de obligaciones, primero comenzando con las familias, pasando por todos los miembros de nuestro Pueblo, incluyendo a las autoridades. Entre las obligaciones están entre otras: el respeto, la convivencia con respeto de los derechos y obligaciones individuales y colectivos, de familia, profesión, etc., no juzgar sin tener la autoridad para hacerlo, no difamar, no discriminar por género,  clase  social  o  económica,  por  la  cantidad  de  conocimiento,  devoción  o  dedicación  a  los  valores  espirituales  de  la  Torah,  la solidaridad con las necesidades. Amar al prójimo, no es solo decirlo y creer que con ello basta, son los hechos, las acciones. Nuestros hermanos deben sentir que el amor es verdadero, que tiene respaldo, compartir con alegría y gozo lo mejor que tenemos y no lo que nos sobra, lo que vamos a desechar. Debemos sacrificar el egoísmo, la avaricia, la falta de generosidad y desprendimiento, pensando que lo que tenemos le pertenece a ÉL, que solo somos administradores y que a ÉL le gusta y ordena que lo Suyo nos beneficie a todos.

 

Día 5 IDOLATRÍA, los mandamientos son para cumplir, no solo los que creamos son los más importantes. Uno de ellos es “No hacer, tener, venerar o adorar imágenes de nada que esté en los cielos o en la tierra o en las aguas debajo de ellas”, de nada que represente la divinidad, a ÉL o a cualquier ser celestial. La principal razón es porque eso lo llama a ira, le irrita la idolatría que las imágenes representan, sobre todo sabiendo que a ÉL nadie lo ha visto, es un Espíritu sin figura corporal, luego, ¿Cómo se podría representar? De יהושועה HaMashiaj, no se guardó ninguna imagen. No hay una descripción de Su físico, ni de Sus rasgos, por lo tanto, es imposible representarlo. La otra razón es que fue la imagen que el Creador usó para hacer al hombre, de manera que debemos ver en cada hombre la imagen hecha a semejanza de ÉL.

¿Para qué suplantarla, si esa fue la voluntad divina? El hombre es la imagen que ËL quiso que tuviéramos de ÉL para amarlo y respetarlo, no para despreciarlo y reemplazarlo con imágenes como las tratamos de representar como la belleza de Su presunta figura inmaculada por el hombre que tiene una concepción propia y caprichosa de la belleza, como si supiera qué es la belleza divina. Debemos sacrificar tolerar o ser indiferentes a las imágenes que se han fabricado presumiendo o “imaginando” cómo son los seres espirituales y la divinidad, contrariando expresamente Su voluntad.

 

Día 6 LA TORAH es la generosidad primero para con ÉL a quien todo le debemos, la existencia, la vida, la especial escogencia dentro de Su Pueblo, nuestros padres, la entrega de Su Torah y escribirla en nuestro ADN, quitarnos la inclinación al mal después de la caída y en su lugar volver a poner una porción de Su naturaleza divina, elegirnos como esposa, comprarnos por precio, apartarnos de las naciones, marcarnos para ÉL, darnos la tierra prometida, compartir la obra de Sus manos. Nos dio la vida de Su hijo para redimirnos, lavarnos y cumplir Su propósito final, darnos nuestras parejas, hijos y Su infinita misericordia y amor eterno. Todo se lo debemos a ÉL, solo a ÉL. ¿Podremos ser ingratos, egoístas, avaros o mezquinos? No, jamás, el hombre fue hecho para la generosidad, para tener las manos y el corazón abiertos para  agradecerle  toda  Su  generosidad,  cumpliendo con  los  diezmos,  las  primicias,  las  ofrendas,  la tzedaká con el  fin  de contribuir  al mantenimiento de Su casa y de Su obra. No es una opción, es un mandamiento y no hay excusas para no cumplirlos, sería un grave indicio de nuestro desprecio por ÉL, por Su autoridad, Su majestad, Su amor y Su gran e inconmensurable generosidad. No hay nada peor que un malagradecido, su ruin y mezquino corazón no puede, ni merece la compasión y la misericordia del Creador y dador divino, no porque ÉL necesite el dinero o los bienes del hombre, porque son Suyos, todo le pertenece, lo que necesita es saber que somos generosos y que, sisomos  Su  esposa,  todo  será  nuestro,  como  herederos.  Generosidad  que  implica  “obediencia”.  Los  obedientes  son  los  que  lo  aman. Debemos sacrificar que somos “malagradecidos y mezquinos” y que no reconocemos que todo se lo debemos a ÉL y le pertenece. El malagradecido,  es  un  mal  nacido  y  nosotros  somos  bien  nacidos  y  eso  hay  que  recuperarlo  mediante  el  sacrificio  del  Omer.  Es  la oportunidad.

 

Día 7 LA MUERTE, es dada por la transgresión, porque la obediencia produce vida eterna. La muerte es la paga con la vida del Mashiaj para la redención y purificación de Su Pueblo. La muerte que padecemos al término del tránsito por la eretz, luego de la caída como una oportunidad para arrepentirse, rectificar y reparar el daño que causamos por la desobediencia en Adamáh. Con esta muerte regresamos a la eternidad, donde el premio o el castigo serán eternos. La muerte es el instrumento que puso el Creador para cumplir Sus objetivos para con el hombre y la creación. El desconocimiento o desprecio del valor instrumental que tiene la muerte es la más grande necedad e insensatez que puede cometer el hombre que la tiene como segura. El hombre no respeta, ni estima la vida, deprecia la muerte y/o la usa como instrumento de su maldad y del mal habido poder de causar dolor y daño a sus semejantes y lo peor es que nos acostumbramos a “vivir” con ella. Lamentable que este instrumento en las manos exclusivas del Creador, el hombre en tinieblas se lo arrebató en contra de la voluntad divina, quien es el único dueño de la vida y lo usa mal para amedrentar a otros hombres, someterlos y quitarles sus derechos ante los ojos pasivos de la inmensa mayoría de los restantes, incluyéndonos a nosotros. Debemos sacrificar este desconocimiento o desprecio de lo que representa la muerte y toleramos de paso que no nos conmueva que se haga mal uso de ella causando primero una desobediencia tremenda al hecho de que solo ÉL es el verdadero dueño de la vida y que tiene expresamente que quitársela al inocente solo permitiéndole que sea la pena máxima para castigar a los incursos en delitos que lo merezcan. La muerte debe ser respetada y es necesario sacrificar porque es potestad únicamente divina.

 

*SEXTA SEMANA*

 

Día 1 TESTIMONIO PERSONAL de cada uno de los hijos del Creador, porque el comportamiento de ellos debe ser una obligada imagen de lo que son y de lo que ÉL puso en su ser total, en su interior y que lo hacen diferente y único en la humanidad. Pero dar mal testimonio y ser piedras de tropiezo para los hermanos y prójimo y/o para los gentiles, es hacer quedar mal al Creador y mal Su especial escogencia sobre nosotros. Ser piedra de tropiezo para los demás, significa que, con el mal testimonio, alentamos e inducimos a los demás a transgredir la voluntad del Creador, porque ellos dirán que, si los escogidos se comportan así, eso autoriza para que los demás lo puedan hacer y eso sería lamentable y una grave forma de irrespetar al Creador quien dirige la vida. Somos “embajadores” de la majestad, la bondad, el amor, el cuidado que ÉL tiene de la obra de Sus manos y en especial de Sus hijos que tienen Su naturaleza y Su Torah escrita en su ADN, que nadie más tiene. Sacrifiquemos con toda decisión y convicción que genera el arrepentimiento, la rectificación y la reparación por el daño que hemos causado en terceras personas que se dejaron influenciar por nuestro mal comportamiento, por el daño que causamos con ello a la causa y a la imagen del Elohim de Israel.

 

Día 2 DISCERNIMIENTO, un don extraordinario que nos puso como dotación en el espíritu que salió de ÉL para saber cómo debemos actuar y si lo que hacemos es bueno o no, como un seguro que garantiza a quien lo pide y lo sabe usar delante del Creador para ser testimonio de que somos sus hijos y lo obedecemos con todo el corazón. El discernimiento acompaña necesariamente a la sabiduría. Tal y como ÉL lo dice, tanto la sabiduría como su agente de medio, el discernimiento lo da, por gracia, sin mérito alguno, porque le plació darlo. Quiere que sea usado por todos los que los que quieran acertar en las acciones para agradarlo. Si lo podemos obtener por gracia, no pedirlo y si lo tenemos, no usarlo es pura y neta necedad y desprecio de lo que nos facilita para obedecerlo dócilmente. Un apersona sabia que tiene y usa además el discernimiento, acierta siempre en lo que hace o deja de hacer para que Su Creador cuando lo mire, se sonría. La sabiduría es la aplicación y las acciones prácticas del conocimiento que el Creador otorga con efectos benéficos y saludables para que cumpla Su propósito para con el hombre de Su Pueblo y Su Reino. El discernimiento hace la diferencia clara y nítida en forma inequívoca de qué se debe hacer o dejar de hacer para aplicar la sabiduría. Debemos sacrificar no pedir sabiduría y discernimiento y si los tenemos no usarlos.

 

Día 3 MUERTE ESPIRITUAL el Creador la impone la física y la espiritual a la persona que practica y hace uso de adivinación, nigromancia, hechicería, invocación de muertos, trato con seres del mundo espiritual de las tinieblas y/o demonios. Tratar de exponerse al mundo sórdido de lo que no está permitido, consultando supuestamente lo que ocurre y el conocimiento de personas que no andan en comunión con el espíritu del Creador y son instrumentos del adversario y de su engaño, desagrada al Creador al punto de que ÉL pide que se les de muerte y sean separados de Su tierra, la eretz Israel. “Dejen a los muertos que entierren a los muertos”. Ustedes, mi Pueblo, no tienen nada que ver con la muerte espiritual y la luz nada que sea común con las tinieblas, el engaño, la mentira, por ello, sacrifiquemos si hemos consultado, escuchado,  creído  conocer  el “futuro”  que  nos  tienen  destinado  según  estas  personas,  porque  eso  solo lo  sabe  el Creador y nuestra confianza solo debe estar depositada en ÉL. Debemos sacrificar el habernos expuesto a las tinieblas, a las argucias del enemigo y sus agentes y depender de sus malas influencias y nocivas invocaciones de ese mundo sórdido.

 

Día 4 PRÉSTAMOS, el Creador ordena que en caso de necesidad debemos prestar al prójimo y no cobrar intereses, devolver la prenda que hayan dejado en garantía en el caso de que la persona la necesite para abrigarse o alimentarse. Aunque debemos ser cumplidos en el pago de los compromisos u obligaciones, debemos tener misericordia y la suficiente paciencia con los que nos deben y que por alguna razón de peso no puedan ponerse al día con la deuda. No es correcto presionar, acosar, ejercer acciones indebidas contra ellos. El Creador da el tiempo necesario para que le cumplamos con los compromisos que hacemos con ÉL y espera que correspondamos de igual manera con nuestros hermanos. Quien tiene misericordia, alcanzará misericordia. Debemos sacrificar la falta de consideración, amor, misericordia y paciencia para con aquellos que la necesitan. La generosa espera y consideración de los problemas, angustias y dificultades insalvables para cumplir, genera que recibamos la paz y en amor del Creador en los momentos de angustia y problemas para cumplir con ÉL y con el prójimo.

 

Día 5 RUMORES, CHISMES, falsos testimonios, mentiras, sindicaciones, juicios y todo lo que no es cierto, es innecesario, no edifica y no beneficia a las personas. Está expresamente prohibido por el Creador, porque lastima y daña la verdad, la transparencia, la rectitud y valía de los que son su especial tesoro, la niña de Sus ojos. Difamar a un hijo del Pueblo de Israel es como decirle al Creador, que se equivocó, que no supo escoger, que fue engañado y además de ser una terrible ofensa para ÉL, es imposible, ya que ÉL jamás se ha equivocado, ni lo hará. Es muy difícil que alguien diga que lo ama y que ÉL es Su señor, y le diga que no fue capaz de hacer una buena elección y fue engañado.

¿Cómo sostener ambas cosas que no son compatibles? Debemos corregir y sacrificar semejante inconsistencia que demuestra la poca madurez o ninguna madurez espiritual y falta de sometimiento a la voluntad divina. Eso, no solo le desagrada, sino que lo condena con toda severidad.

 

Día 6 DISCIPLINA Y ORDEN, dominio propio, el cuidado del cuerpo y la salud, el aprecio y el gusto por la comida y la bebida son las instrucciones que nos dio en la Torah para hacer de nuestras vidas un testimonio vivo de Su especial escogencia, de que mora en nosotros y nos guía y protege de todo lo que nos agrede, incluyendo los excesos. La glotonería, la embriaguez, la lujuria, el placer por el placer son enemigos de la santidad y la comunión con el Creador. El aspecto físico revela el grado de auto control de una persona. Da la impresión del cuidado y consideración que se tiene con la salud, el mantenimiento y cuidado del templo, que es el cuerpo. Si no hay problemas de metabolismo, que impidan que el cuerpo se mantenga en forma. Si creemos que debemos ser armónicos en nuestro ser y así agradar al Creador que es perfecto y nos hizo a Su imagen, entonces, es mejor sacrificar todos los excesos que hemos cometido que rompen esa armonía, desequilibran el dominio propio y la disciplina que ÉL quiere que tengamos para ser testimonio de sujeción a Su voluntad divina.

 

Día 7 VIUDAS Y HUÉRFANOS, ÉL es el protector de ellas y padre amoroso, proveedor de cuidados para los huérfanos, por ello, quien se atreva a pensar en abusar, despojar, engañar o creer que estos seres en el Pueblo de Israel son desprotegidos o desamparados por su aparente fragilidad, está completamente equivocado y se verá cara a cara con el Creador, quien personalmente los tiene a Su cargo y bajo Su cuidado especial. La mayoría de las viudas y huérfanos en Israel fueron consecuencia de las guerras de defensa por los constantes ataques de los enemigos y de las potencias que los querían someter, quitarles las tierras y/o esclavizarlos. Por ello, el Creador es tan especial con ellos, porque además de perder a sus seres queridos contribuyeron con la defensa de su Pueblo y tierra y eso para ÉL es muy importante. Pero sea esta la causa u otra, ÉL está atento y protege a Sus viudas y huérfanos sustituyendo y cubriendo ese faltante afectivo, sentimental y material. Jamás se nos debió rumorar, pensar mal o aprovecharnos de la aparente indefensión de ellos en nuestro Pueblo o con los gentiles que fuera. Debemos sacrificar cualquier cosa que hayamos hecho en el pasado o que consintiéramos que otros hicieran contra estas personas, porque eso no lo toleraría el Creador y traería consecuencias funestas para nuestras vidas y salud espiritual.

 

*SÉPTIMA SEMANA* 

 

Día 1 ESPÍRITU O CARNE, obedecer a uno de los dos, marca la gran diferencia e identifica de una manera clara nuestro origen, destino y la comprensión de la voluntad divina y muy especialmente de la escogencia que hizo el Creador de nuestras vidas. Los que son salidos o nacidos del espíritu entienden las cosas del espíritu, pero los que son de la carne (alma y cuerpo), de la razón, no las entienden y les parecen locura. Para quienes tienen que “entender primero antes de obedecer”, los secretos, las verdades, las manifestaciones del Creador son un misterio que no fue revelado, por lo tanto, los interpretan como ellos creen que son, con sabiduría y conocimiento humano, aumentando la confusión y sumiéndolos más en el error. Cuando no entienden por más de que traten de justificar las cosas, recurren a la misericordia del Creador o a la revelación negativa del Ruaj HaKodesh y se reafirman en su extravío espiritual “Yo mismo (ÉL) les di mandamientos y estatutos y días de reposo, que al que los practica no le dan vida eterna”. Ezequiel 20. Sacrificar y vivir bajo la carne, bajo la razón y tratar de entender antes de obedecer. Por ello, es imposible obedecer dócilmente lo que el Creador quiere aún sin explicación lógica y ser justos, santos y luego de obedecer y recibir los beneficios por hacerlo. El Creador da las explicaciones correspondientes a la razón. Cuando hagamos este sacrificio todo nuestro corazón, nuestras vidas serán lo que ÉL quiera y Su amor divino y generosidad se hará una gran y extraordinaria realidad espiritual y eterna.

 

Día 2 VOTOS Y PROMESAS, el Creador no nos pide que los hagamos, porque puede que no las cumplamos y ello produce una sanción espiritual inconveniente. Dice el Creador que es mejor no hacerlos y confiar en Su amor y cuidados porque no se le ha escapado de Su solución y control tus necesidades y problemas. ÉL está comprometido a hacerlo y conseguir tu bienestar con la simple condición de “hacerle caso” y obedecer Sus instrucciones sabiendo que a los Suyos, a los salidos del espíritu, a los de Su Pueblo, a los que tienen en Su ADN, Sus instrucciones (Torah), ÉL mismo cumple o ayuda a cumplir por nosotros y si a eso le agregamos que sacó de nosotros la naturaleza pecaminosa y puso Su naturaleza divina, entonces con semejante ayuda para qué hacer votos o promesas que provocan el riesgo de no ser cumplidos y provocar Su enojo innecesariamente. Es mejor suprimir esa costumbre pagana y solo depender de ÉL, abandonarse en Sus manos generosas y amorosas, esperar Sus tiempos y sazones. Sacrifiquemos esta mala y dañina costumbre de hacerle a nuestro Elohim votos y promesas, juramentos, pactos que la mayoría de las veces quebrantamos, violamos o no cumplimos, haciéndonos acreedores de Su ira y disciplina. Al sacrificar esta fea y mala costumbre quedamos libres y sanos de todo lo que nos somete y oprime sin necesidad porque a ÉL no le agrada.

 

Día 3 SANTAS CONVOCACIONES, acudir a las citas o Fiestas, no solo es un mandamiento, sino una clara manifestación de elemental respeto, reconocimiento y acatamiento a ÉL como Amo y majestad del universo, quien lo sostiene y lo bendice, quien nos dio la vida y nos ofreció compartir Su amor, la obra de Sus manos, la creación. Aclaremos que solo el Creador tiene el poder y la majestad para “citar y convocar” a Sus criaturas y no al contrario como hacen los gentiles con supremo atrevimiento y falta de respeto. ¿No es una insolencia reemplazar las Fiestas o citas del Creador por convocaciones de iglesias o doctrinas de hombres que no tienen esa autoridad porque nadie se las ha delegado? En las citas que nos hace, el Creador transmite Sus secretos y en forma didáctica nos enseña los ensayos y sombras de todo lo que ocurrirá en Su Pueblo. Es el único pueblo de la tierra que acude a etas citas con toda puntualidad, en los tiempos que ÉL estableció con anticipación en la Torah, que, dicho sea de paso, los gentiles dicen son la ley, un yugo imposible de cumplir como disciplina por haber matado al Mashiaj. Que lo hagan los gentiles paganos pues no son obedientes al Creador y segundo porque como decidieron no obedecerlo en lo que dice la Torah, el Creador les dio mandamientos, decretos, estatutos, y días de fiestas (citas) que no son las que ÉL quiere que cumplan los nuevos, los que no están en la Torah, sino en las religiones. No tendrán vida eterna. Ezequiel, todo el capítulo. Al salir de la asimilación es necesario sacrificar el incumplimiento de las citas que ÉL hace y comenzar a acudir a ellas con toda devoción y puntualidad para manifestar el debido respeto y sometimiento dócil a Su voluntad como nuestro Elohim, redentor y esposo que es.

Día 4 LA EJAD, la sutileza de las posiciones que tomamos para justificar, la ignorancia o el rechazo de que nuestro Elohim, el Creador y Salvador,  Su  Espíritu  de  Santidad  y  ÉL  mismo  hecho  hombre,  son  una  sola  divinidad,  una  sola  persona,  la  ejad.  Esta  es  una  verdad indiscutible que solo viven y sienten las dos tribus que permanecen fieles a Su Elohim, en la eretz Israel, pero las 10 tribus de Israel dispersas, asimiladas entre las naciones y los gentiles paganos, son politeístas, pero dicen que son monoteístas a pesar de la confusión de sus planteamientos como el de “tres personas distintas y un solo Elohim verdadero”, que enuncia una religión conocida. Reconocer, confesar y vivir la experiencia que nos dice la Torah que es una verdad indiscutible de que nuestra divinidad es ejad, Uno y Único, fue, es y será, así tenga diferentes papeles como. El Padre, el Creador, al Amo del universo, el que sustenta, el Juez justo, toda la autoridad y fuente de esta. Tiene un espíritu de santidad que enseña, clama, gime por Sus criaturas, que nadie ha visto y no puede hacerlo sin perder la vida, decidió hacerse carne como Mashiaj, a Su imagen y semejanza, creó al hombre, su máxima obra. En la manifestación del Mashiaj dio Su vida material para redimir al hombre y como es una manifestación visible reinará con el Pueblo de Israel en toda la creación por la eternidad compartiendo Su amor. Todos esos papeles los desempeña una sola persona, un solo espíritu, una divinidad, la ejad. Esto solo lo entienden los que son del espíritu, que son los miembros escogidos de Su Pueblo. Los gentiles no lo entienden y no lo practican. Debemos sacrificar el hecho de haber vivido o consentido con el gran error de desconocer la ejad, que ÉL exige en Su Torah.

 

Día 5 DIEZMO, el Creador es el dueño del oro y de la plata, de toda la creación. Dice la Torah que uno de Sus mandamientos de obligatorio cumplimiento es “Dar el diezmo, las ofrendas, las primicias y ayudar a los pobres”. Algunas personas piensan que, si el Creador es dueño de todo, no necesita que el hombre le devuelva el 10% de sus ingresos y las primeras utilidades de cada cosecha, negocio y además adicionar la ofrenda. Esto bajo el punto de vista de la razón humana parece muy lógico, pero la razón del Creador es de múltiple explicación: en primer lugar, ÉL quiere que reconozcamos que todo lo que tenemos, incluyendo los ingresos por el trabajo, cualquiera que sea, es porque ÉL nos lo dio; segundo, sostener a Sus servidores en el templo, en la edificación y cuidado espiritual de Su Pueblo; tercero, sostener y mantener el templo, los utensilios que se usan para enseñar y servir en los cultos para alabarlo y honrarlo y que necesiten los miembros de Su Pueblo; cuarto, para ayudar a los pobres y personas que lo necesiten; quinto para probar el corazón de los miembros de Su Pueblo en cuanto a la obediencia y generosidad. Este es uno de los 613 mandamientos y el Creador da promesa a quien lo cumple: “Probadme en esto sino os abriré las puertas de los cielos y haré caer lluvia sobre vosotros para sobreabundaros” y además dice: “Quitaré de vosotros al devorador y no pediréis prestado, en cambio, prestarás a otros y tendrás abundancia de bienes hasta saciaros”. A quien cumple con este mandamiento con alegría, el Creador lo sobreabunda y hará que le sobre luego de cumplirlo. No solo habrá suficiencia para cubrir sus necesidades y deseos, sino que lo hará libre económica y materialmente, sin mezquindad, ni egoísmos. Debemos sacrificar el hecho de no cumplir este mandamiento o cumplirlo de vez en cuando o hacerlo porque es una obligación sin alegría y sin generosidad y reconocimiento de que, si no fuera por ÉL, no tendríamos nada. Existe un gran tesoro en nuestro corazón, el ser generoso y agradecido, ÉL lo valora mucho y lo retribuye con infinita generosidad y amor.

Día 6 AMAR A Elohim, Su majestad, dador de la vida, Creador y Redentor, por Su infinito amor, generosidad, porque le plació otorgarnos la vida, escogernos entre todos los seres de la creación, hacernos a Su imagen y semejanza, querer compartir Su amor y todo cuanto creó con nosotros al hacernos Su esposa, Su especial tesoro, la niña de Sus ojos. ÉL es celoso y no desea compartir ese lugar, el más grande y único en nuestro corazón con nada, ni nadie. ÉL quiere que lo amemos por encima de todas las cosas y seres de la creación y lo reclama con mucho énfasis cuando dice: “Yo Soy Santo, sean ustedes santos”. Quiere decir: “Yo me separo de todo para ustedes, sepárense ustedes de todo para Mí”. A nosotros que estuvimos asimilados en el mundo, en las naciones hasta que ÉL nos llamó de regreso a Su Pueblo por las sendas antiguas de la Torah, nos queda muy difícil cumplir a veces esta exigencia, porque el mundo puso otros valores en nuestro corazón que con frecuencia los ponemos por encima Suyo, sin mala intención e inconscientemente. Por ejemplo, el conocimiento y la ciencia, la riqueza, el prestigio, la posición económica, social o política, y otros factores. Nada está por encima del amor, la sumisión, la reverencia y la fidelidad al Creador. Debemos arrepentirnos, rectificar y reparar mediante el sacrificio de este gravísimo error y agravio a nuestro Creador, Su majestad יהוה.

 

Día 7 LA TORAH, el Creador la ofreció a los gentiles. Es bien conocido hasta hoy el rechazo a obedecerla como la voluntad, instrucciones, mandamientos, decretos, estatutos, y días de fiesta a los que convoca. Solo el Pueblo de Israel la aceptó con todas sus fuerzas y el gozo que correspondía, lo cual provocó que ÉL lo escogiera como Pueblo, Su pareja, y esposa. Debemos sacrificar el tiempo que no reconocimos, no vivimos, no estudiamos, no apreciamos lo suficiente la Torah, pedirle perdón y afligir nuestros corazones por semejante despropósito e ignorancia espiritual y volver a la Torah con todo nuestro corazón y energía para agradarlo y cumplir con ÉL Suplan perfecto y propósitos.

 

Todos los mecanismos que puso a nuestra disposición el Creador no solo a la salida de Egipto (el mundo, las religiones, las doctrinas de hombres)  y  todas  las  naciones,  las  ataduras  y  esclavitudes  que  nos  oprimían  y  en  las  que  estábamos  asimilados  con  gran  error desagradándolo a ÉL) como el sacrificio del cordero de Pesaj (la vida del Mashiaj, nuestra redención y liberación) los panes sin levadura, los sacrificios  del  Omer  (44  elevaciones  recuperando  los  49  descensos  en  los  que  incurrimos  en  asimilación  y  el  cautiverio),  la  teviláh, inmersión en agua para purificación ritual (que la iglesia rechazó y cambió irresponsablemente por la figura extraña que jamás se le ocurrió al Creador, que llamaron bautizo) el día de la expiación o Yom Kipur, las redenciones, los sacrificios propiciatorios que antes eran de animales en el templo y que en ausencia del templo y luego del sacrificio del Mashiaj en el madero, son nuestro constante arrepentimiento, rectificación y reparación a través de nuestras oraciones y comunión con ÉL. Debemos aprovecharlos todo el tiempo para que nuestras vidas transcurran como ÉL desea en santidad y en justicia para agradarlo con amor y gratitud. ÉL es todo para nosotros, nuestro principio, nuestra vida, nuestro objetivo final. ÉL es nuestra esencia, amor y toda la gloria y el honor sea para ÉL por siempre.

 

Con ellos, Su amor eterno, todos los bienes y la autoridad para gobernar la creación, señorear sobre ella y disfrutarla eternamente. Las naciones dicen que la Torah es un yugo imposible de obedecer y vivir, que solo es para el Pueblo que la recibió como disciplina o castigo porque es deicida al quitarle según ellos la vida al Mashiaj y que por haberlo “reconocido”, el Creador les entregó el Brit HaDashah (nuevo testamento) por gracia y dándoles la redención en el Mesías que llaman Jesús o Jesucristo, la Torah viviente, el verbo encarnado.

 

Dicen los gentiles que ellos quedaron exonerados de la ley (Torah) porque Jesucristo la “cumplió toda en la cruz” y con Su muerte y resurrección ya no están obligados a vivirla, menos a cumplirla y obedecerla.

 

Pero para otros la Torah es nuestra madre, la reina, es la constitución del universo, del Pueblo de nuestras vidas y ÉL facilitó cumplirla mediante dos instrumentos que puso en cada uno de los de Su Pueblo de Israel:

La escribió en el corazón y la puso en la mente (ADN)

Puso Su naturaleza divina en cada uno de ellos al sacar la naturaleza pecaminosa.

Esto está muy claro en IermiYahu31:31-37.

 

Nos diferencia de todos los pueblos y naciones y permite que sea ÉL mismo quien cumpla en nuestras vidas Su Torah por o con nosotros, lo cual  hace  que  no  sea  una  carga,  sino  una  gran  bendición  y  regalo  por  amor  a  los  Suyos  quienes  dijimos  en  Sinaí:  “Haremos  y Obedeceremos” todo lo que nos ordenes por siempre.

 

Es también por ello que hizo Sus pactos, entregó Sus promesas y bendiciones y las depositó eternamente solo en el Pueblo de Israel y dijo que éramos Su Pueblo y ÉL nuestro Elohim. ÉL no se equivoca, ni se arrepiente, jamás cambia de opinión y mucho menos deja de cumplir Su palabra.

 

Hemos sacrificado nuestras espigas por 49 días, 7 semanas y hemos llegado por Su misericordia al nivel de santidad que ÉL dispuso para nuestras vidas a la salida y luego de haber abandonado la esclavitud y el error. Ahora luego de purificarnos, no tocar mujer por 3 días, recibiremos las tablas que contienen el contrato matrimonial (Ketuváh) y la Torah, escrita en nuestro ADN en original, sin alteraciones, sin traducciones para que sellara en nosotros Su compromiso y juramento de llevarnos a la tierra prometida, primero a la eretz Israel y luego a la morada eterna, al trono celestial donde viviremos por siempre y eternamente reinaremos con ÉL en toda la creación.

 

Damos infinitas gracias a ÉL por permitirnos sacrificar y limpiar todo lo conocido y lo oculto que tenemos en nuestras vidas para conseguir agradarlo y ser justos para ÉL. Amén

 

*IOSHIYAHU*